Volver a la historia, a los rituales de las culturas antiguas que se siguen practicando en la actualidad; evocar estas ceremonias para encontrar inspiración y, en ese afán, descubrir la misma emoción en un pago a la tierra, un baño de florecimiento, la lectura de las hojas de coca y la intención con la que se enciende el incienso. Ese fue el punto de partida y el proceso de investigación para Rituales, nuestra nueva colección que, esta vez, ya no es solo de textiles, sino que incluye piezas de cerámica. Una adición natural pues es otra práctica ancestral peruana que ha pasado de mano en mano durante generaciones, hasta ser uno de los formatos del diseño contemporáneo más interesantes.
Tejedores de telar de Lima y de Huancayo han unido la lana de oveja con fibra de algodón: nace un material distinto, más fino, y se consiguen piezas con un acabado más sofisticado. La nueva textura ha invitado a una paleta distinta en nuestra producción: dominan los tonos pasteles que impregnan de frescura y de verano las alfombras, tapetes, cojines, vasijas, quemadores de incienso y vajilla. Objetos que se vuelven herramientas vitales para el ritual moderno más sagrado: la búsqueda del bienestar.
